
Esta mañana fui testigo una vez más de la estupidez que caracteriza a las fuerzas de seguridad.
Un grupo de alumnos fue a protestar a casa de gobierno por la falta de gas en la escuela, y ante la protesta, fueron reprimidos por más de un centenar de policías, y luego alrededor de 60 adolescentes fueron detenidos y llevados a la Comisaría del Menor.
Desde la policía aducen, ante la por lo menos desproporcionada utilización de la fuerza, que los menores estaban cometiendo destrozos a coches particulares y que tenían intenciones de prender fuego algunos autos. Yo, que estuve ahí, jamás vi dichos destrozos, ni mucho menos los elementos que , siempre segun la fuerza de seguridad, tenían para prender fuego.
No es mi intención justificar a los jóvenes piqueteros, ni mucho menos. Es más, me parece correcto que la policía evite desmanes. Lo que no me entra en la cabeza es el por qué de ese desmedido uso de fuerza, sobre todo contra un grupo de chicos de 14 ó 15 años. ¿Dónde quedó ese celo por el buen funcionamiento civil cuando los que cortaban las calles eran los empleados estatales, ya sea los nucleados en A.T.E., SUTE, los Judiciales, los basureros, o incluso los mismos limpiavidrios, etc.?
Hay que tener en cuenta, que en un principio se dijo que un juez, el Dr. Jadur, había dado la orden de reprimir y detener a los alumnos. Esa orden nunca habría sido dada.
Me da mucha bronca ver a un miembro del cuerpo de infantería golpear solapadamente a una chica de 15 años, así ésta lo haya insultado.
Y más bronca me da que los chicos, que solo piden gas en sus escuelas, sean tratados como delincuentes peligrosos.
Por supuesto, ahora todos se lavan las manos.
Olaff el Vikingo.